Integridad en un mundo difícil

Sabemos que estamos en tiempos difíciles donde la violencia y la inmoralidad se están apoderando de nuestra sociedad. Cada vez más son las noticias que vemos. E incluso los derechos humanos parecen ser derechos más de aquellos que nos oprimen. 

Escuchamos mayormente el concepto de la legítima defensa, cuando son nuestros líderes gobernantes quienes son  acusados, pero cuando un pobre comete una infracción parece que la justicia es rápida e implacable. También escuchamos sobre organismos internacionales estar preocupados por los derechos de los privados de libertad, en donde ponerlos a trabajar es visto como esclavitud. Sin embargo, ¿dónde están los derechos de los que tratamos de vivir honestamente? 

En fin, lo que antes era prohibido hacer, parece ser que ahora es aprobado y premiado. 

Pero, ¿Qué tan violento es nuestro tiempo actual? porque si lo comparamos con el pasado, ha habido tiempos violentos. La primera y segunda guerra mundial por ejemplo fueron tiempos violentos y cruel, la segunda fue una alianza entre la Alemania Nazi y Japón, donde el hombre más popular es recordado como Adolf Hitler. 

Ahora, piense. ¿Qué sería de un mundo con varios Adolf Hitler en cada país y gobierno?

Esto nos lleva a un relato semejante en la Biblia, que lastimosamente se tergiverso de una manera extraña, pero que en realidad es casi semejante a lo que estamos hablando. 

Lea Génesis 6: 1 al 8. 

“Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas,  que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre. Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho. Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.”

La generación de Génesis 6, es recordada como una generación perversa. Ahora bien, hay algunas cosas que tenemos que dejar en claro. 

Para ello dividiremos este suceso en tres partes. Primero trataremos de identificar quienes son los “hijos de Dios” del versículo 2. Segundo, trataremos de enfocarnos en los Nefilines o gigantes y, Tercero, el desenlace o epílogo. 

1. Los hijos de Dios: existen tres posturas sobre los hijos de Dios. 

A. La descendencia de Set. Observe que el relato bíblico en el capitulo 4 y 5 habla de la descendencia de Caín, entre los cuales se resalta su pecado como Lamec quien empieza la poligamia; Tubal – caín artifice de hierro y bronce, un hombre de armas y violencia. La descendencia de Set es recordada en Génesis 4: 26 como aquellos que empezaron a invocar el nombre de Dios.

B. Ángeles caídos o demonios que tuvieron hijos con mujeres. Esta postura se sostiene  en pasajes como Job 1:6; Salmos 29:1. En donde los ángeles son llamados como “hijos de Dios”. 

C. Nobles y gobernantes. En medio oriente antiguamente a los de la nobleza o gobernantes (reyes) se les llamaba también hijos de Dios. 2 de Samuel 7:14; Salmos 2:7. 

Quienes hayan sido, dice Moisés en el versículo 2, “tomaron para sí mujeres” esta frase no es la misma que él usa cuando hablaba de matrimonios. Por ejemplo, con Adán y Eva uso la palabra conocio (Génesis 4:1) también se observa de Caín con su mujer (Génesis 4:17). Esta palabra conoció, quiere decir en hebreo “Union física” y no  una presentación como lo entendemos en español. Esto se corrobora cuando los pasajes dice: “concibió y dio a luz…”

Entonces, la expresión “tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas” (verso 2) se refiere a violaciones constantes. Y si hubo una época en donde Dios se vió afligido por la degeneración del hombre fue en la generación de Noé. 

¿Cuál era el pecado de estas mujeres? ¡Ninguno! el verso 2 dice que fueron víctimas a causa de su hermosura. 

Regresando a los hijos de Dios, personalmente me inclino a la tercera opción. La cual es más consistente para mí. Pero usted puede tener su percepción personal y su postura, sin embargo, recuerde quienes hayan sido, usaban a las mujeres y abusaban de ellas. 

2. Los gigantes o Nefilim. Observe que en el versículo 4, Moisés dice: “en aquellos días, y también después” Estos eran hombres crueles. 

Otro versículo de la Biblia, que hace referencia a Nefilines es Números 13: 32 al 33. Cuando los espías fueron a reconocer la tierras de Canaán. ellos describieron a los hijos de Anac como gigantes y ellos  (espías) como langosta. 

Según el relato completo, se observa un terrible pecado que deja consecuencias en la sociedad. Violaciones constantes que dejaban hijos huérfanos, que crecían sin ley, sin respeto por la vida y ni mucho menos respeto a Dios. Todo esto atenta contra el plan original de Dios para el hombre, y la familia en el mundo. 

El pecado fue grave, el mundo tuvo que ser cubierto completamente en agua, para volver a empezar lo que se había hecho.

3. El desenlace. Aun en ese tiempo de perversión, era aprobado por quienes tenían poder y autoridad. Hubo un hombre que decidió no corromperse, Noé. El versículo 8 dice: “Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.” 

Vemos en esta historia, y aprendemos que la responsabilidad de vivir dignamente es algo meramente personal. Noé nos deja la evidencia que si es posible vivir rectamente aun cuando parezca que todo está perdido, el verso 9 describe a Noé de la siguiente manera: “Noé, varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Dios caminó Noé.” 

Viva con rectitud, no solo por usted, sino también por Dios y le aseguro que eso también impactará la vida de otros y dejará un modelo para ellos. 

Proverbios 20:7 dice: “Camina en su integridad el justo; Sus hijos son dichosos después de él.” El final de la historia, ya lo sabemos. Noé entró al arca con su familia, incluyendo a sus hijos. 

Ahora bien, aunque todo esto parezca tiempos violentos, en el Nuevo Testamento encontramos la frase: “porque vendrán tiempos peligrosos” (2 de Timoteo 3:1 al 9)

Usted puede leerlo, y sabrá que la violencia es peligrosa, pero para los cristianos no hay mayor peligro o violencia que una doctrina errada. ¿Por qué? Bueno, porque con Violencia o sin violencia, está escrito “que el hombre muere una sola vez y después el juicio” (Hebreos 9:27). Y una falsa enseñanza puede conducirnos a dos lugares que son seguros después de la muerte: el cielo o el infierno. (Hablaremos de esto en otra lección) 

Finalmente hermano, haya o no violencia, nuestro deber es ser hallados rectos y justos como Noé y su familia. Y sobre todo fieles a las Palabras de Dios, porque ellas son las que pueden guiarnos por el buen camino que lleva a la Salvación de nuestras almas.

¡Dios le bendiga!